Quién me lo diría a mi que después de seis años volvería a la oficina donde crecí como empresario, volver allí me hizo retroceder a esos tiempos donde observábamos pasar por las ventanas los camiónes con muchas maderas, diariamente los veíamos, pero nosotros nunca parabamos de trabajar archivar papeles, atender al teléfono, clasificar, asistir a reuniónes, etc. A pesar de que pueda sonar algo muy aburrido esto de ser oficinista, nos ilusionábamos como niños al ver que otro producto habíamos creado a partir de un trozo de madera.
Pero claro, eran otros tiempos, yo empecé a trabajar allí en el año 1969, mi empresa se dedicaba al negocio de la madera, por decirlo de forma sencilla transformábamos la madera en lo que el cliente deseara, desde grandes vigas hasta palillos de dientes, yo estaba orgulloso del palillo plano, quizás al jefe Jose le viniera la inspiración a la cabeza al ver una astilla chafada completamente, fui yo que la chafé sin querer con el coche y quedó hasta quedar plana. ¡Está claro que el destino de la madera me llamaba! ¡Toqué madera para tener suerte! Y además soy un hombre de gran madera. ¿ Que mas se puede decir?
En el año 2009 los jefes decidieron trasladar la fabrica a otra parte, y que dejáramos todo lo que teníamos en la oficina por que estaba todo muy anticuado y obsoleto, yo no la veía tan anticuada y obsoleta, y menos las oficinas. (Quizás por que nací en otra época), me dió una pena atroz dejar el sitio donde trabajé desde 1969, tanta pena que al dia siguiente me diagnosticaron amnesia debido al shock.
No sabía ni quien era ni donde estaba, hasta que recordé poco a poco donde trabajaba y a mi familia, una vez recuperado me levanté y fuí al trabajo, claro que, ¡Tampoco recordaba que estaba jubilado! Pero la sorpresa fué enorme al ver que esas oficinas estaban ahora abandonadas, sin nadie, sin risas, sin los ruidos de las fotocopiadoras, impresoras y teléfonos, era todo desierto, olía a humedad y estaba todo destartalado, al girar la cabeza vi un clandario fechado en 2009, y varios papeles de la misa fecha.
¿Se paró el tiempo? ¿O quizás fuí yo que vió pasar el tiempo demasiado deprisa? Si en tan pocos años cambian las cosas, imaginate una persona que nunca pueda morir, creo que se volvería loca en vez de sabia, creo que tenemos nuestra época, como tu la tuya y el la suya, por eso hay que disfrutar el momento, ser nostálgicos para las cosas buenas, y valientes para el futuro.
En fin, disfrutad de este nuevo reportaje de Flechcorp & ToniDarkBlackBcn, yo me vuelvo a mi casa por que ya he tenido suficiente por hoy, las lágrimas ya no me dejan ver, pero esta vez no lloro de tristeza, si no de emoción de recordar aquellas cosas bonitas que viví y me olvidé. ¡Viva la vida! ¡Chau Riau!
Exploración realizada por: Flech & ToniDarkBlack.
Fotos por: © Flech
© Flechcorp - Agosto de 2015 - Todos los derechos reservados.
Member of G.A.L.A. (Grupo de Amigos de Lugares abandonados)
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¿Adonde fueron mis compañeros? |
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Este sitio de aquí era donde yo trabajaba. |
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Y eso que el letrero dice mantener el archivador limpio y ordenado... |
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Y ahí dejamos el calendario. |
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Y los utensilios. |
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Las plantas ya se cuelan por las ventanas. |
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Office. |
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Me gustaría saber quien fue el gracioso que tumbó esa estantería. |
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El salón de estar era mas tranquilo, aquí haciamos las reuniones. |
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Me dejé los palillos. |
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¿Creéis que os diré la contraseña de la caja fuerte? |
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Pues anda que no atendía a llamadas yo aquí. |
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Vista de las oficinas. |
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Y esto de aquí era la casa del técnico carpintero. |
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Como era de suponer todo era de madera. |
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Pero lo importante, es también asearse. |
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