martes, 14 de mayo de 2024

Flech Urbex presenta: Las naves industriales abandonadas de Miguel Torres.

Flech Urbex presenta: Las naves industriales abandonadas de Miguel Torres.

¡Muy buenas exploradores! ¿Qué tal estáis? Espero que os vaya todo bien, y si algo os va mal no hay nada mejor que encender vuestro ordenador, teléfono inteligente o vuestras "tablets" y  empezar a buscar por "Flech Urbex" o "Flechcorp" y entreteneros viendo un reportaje sobre lugares abandonados de los míos para que os suba un poquito los ánimos. ¡Es lo que tiene la magia de los lugares abandonados! O mejor dicho: ¡De los reportajes con la garantía garantía de calidad Flechcorp desde 1998!

Pues bien amiguetes, en esta ocasión me complace presentaros un popurrí de naves industriales abandonadas un poquito diáfanas, pero no por ello están exentas de detalles, y es que, aunque muchos digan que las naves industriales vacías no tienen su encanto, he de decirles que se se equivocan rotundamente, y es que en este reportaje os voy a demostrar que con poco de salero fotografiando y explorando se pueden ver y apreciar detalles muy curiosos. ¡Vamos! Que si me apuro hasta podría sacarme hasta un "Pullitzer" en fotografía, si eso existiese, claro. ¿O si?

Seguramente os habréis quedado un poco a cuadros con el título de esta entrada. ¿Unas naves abandonadas de Miguel Torres? ¿Son esos que tienen una bodega de vinos y de Brandy en Vilafranca del Penedés? ¡Pues no! Estas dos naves eran en realidad de una empresas de plásticos y otra de materiales de construcción, pero como ya os dije, siempre hay detalles un poco curiosos, y en una de ellas sin quererlo no beberlo me topé con que tenían guardadas barricas antiguas de las Bodegas Miguel Torres de la década de 1970 y de 1980 si me apuro. ¿Cómo fueron a parar ahí? Pues a saber... Es por eso mismo que le puse este nombre al reportaje. ¡Para nada lo hago para hacer "Clickbait"! ¿Eh? ¡Que son barricas de ahí leches!

También podremos observar dentro de estas naves algunos detallitos que todavía perduran por ahí aparte de esas barricas destartaladas, como las taquillas de los currantes, maquinaria, cajas fuertes, grafitis, ventanas, y ya de paso podéis ver la arquitectura industrial que también mola mogollón. Por cierto, este reportaje lo hice en compañía de mis inseparables colegas de aventuras Fran Globetrotter y Laurix "Urbex Days", para no perder la costumbre.

Y ya que estoy por aquí os vuelvo a dar un consejito de explorador urbano, mas a hora que hay muchos novatillos y gente imprudente y ansiosa en el "mundillo" del "Urbex" que solo van a cazar "likes" y "visitas" para sus redes sociales, y es que a estos lugares aunque algunos puedan parecer seguros, siempre hay que ir con pies de plomo, ya no solo por quién te puedas encontrar ahí dentro, si no por los peligros que puedan haber, como por ejemplo: Agujeros en el suelo, gases tóxicos, techos medio caídos, amianto, cables eléctricos... y sobre todo no hacer el ganso para conseguir la foto mas "arriesgada", sobre todo si no queréis acabar como ese "influtontaina" (Influencer) llamado "Tzane" que se asomó a un balcón medio derrumbado en uno de sus viajes a un pueblo fantasma, donde este cedió y ese pobre iluso acabó matándose en una caída de varios pisos por su imprudencia. Hacedme caso que yo si que tengo verdadera "influencia", si no sabéis explorar, quedaos en casa tomando un vasito de leche bien calentita mientras los verdaderos exploradores nos arriesgamos por vosotros. ¡Que eso no quita que no hayamos tenido algún "susto"! De hecho yo he tenido unos cuantos! Pero yo exploro por que a mi me gusta, no lo hago por vosotros, yo solo os muestro mi trabajo, que os guste o no ya me la sopla, al fin y al cabo, no voy a matarme por que unos seguidores me digan lo que tenga que hacer. ¿Verdad?

En fin amiguetes, después de esta gran parrafada clásica y de algunos consejos básicos para los tiempos modernos, un servidor se despide por ahora hasta el próximo reportaje sobre lugares abandonados! Y ya sabéis... ¡Id siempre con buen ojo y... ¡Buena exploración! ¡Hasta la próxima amigos míos! ¡Adiósitoooo! ¡Chau Riau!

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Las naves industriales abandonadas y vacías siempre suelen ser escenarios de muchas películas, o de Raves...

Este flamenco lleva ahí desde el año 2017. Pero sé que esta nave se abandonó allá por el año 2008. ¡Casi nada!

Encima tenía buenas vistas a la montaña.

Aunque desde este despacho podías ver lo que hacían los trabajadores. ¡La dura vida del jefe!

La verdad es que la nave industrial es grande.

Una caja fuerte "Soler" que fue reventada hace eones. Hace poco un tipo en Instagram puso una caja Soler de hace 100 años que estaba en una mansión lujosa abandonada. ¿Cuántos años tendrá esta empresa de cajas fuertes?

¿Sería esto la cafetería?

Me pregunto que es lo que fabricaba en este lugar...

Ahora bien. La nave por fuera con ese abeto ahí todo secano le da un toque siniestro a la foto.

Aunque vamos a poner la foto de esta antigua nave junto al abeto reseco, que le da un toque tétrico y decadente total.

Y ya por fin llegamos a la nave de la botas o barricas de Miguel Torres.

Fue fácil de adivinar por el logo de las tres torres que utiliza esa empresa bodeguera, además por ese logotipo supe que estas barricas tiene ya sus décadas por aquí olvidadas.

Y la verdad es que habían unas cuentas. ¿Cómo fueron a parar en el quinto pino? Pues a saber...

Y la verdad es que habían unas cuentas. ¿Cómo fueron a parar en el quinto pino? Pues a saber...


Una nave vacía, pero con un buen juego de luces.

Vamos a darle un toque doradito a las barricas de Miguel Torres.

La nave industrial estaba bastante vacía, pero oye, era fotogénica.

Parece que ahí dentro tenían algo de maquinaria agrícola.

Me pregunto para que serviría esta cacharro.

Mas objetos olvidados.

Al fondo, el gran Fran Globetrotter explora el lugar.

Supongo que esto de aquí serían las oficinas.

¡Y yo por aquí encerrado! ¿Sabes?

Otra fotito mas de las oficinas. ¡Que me ha quedado chula!

Los amigos de lo ajeno no han dejado ningún cable por aquí

Supongo que aquí hacían hasta traviesas de hormigón para las vías del tren. Vaya vaya...

Aquí debieron de tener un gran puente grúa fijo.

La nave por dentro es super amplia. Fijo que fabricaban materiales de tamaño considerable.

Restos de lo que queda de la antigua actividad industrial.

Pues si. Seguro que harían hasta vigas o piezas metálicas, mas que nada al ver esta señal de uso obligatorio de gafas protectoras.

¡Vaya! Lo que queda de un cuadro eléctrico.

Vistazo de esta nave desde otro ángulo.

Una caja fuerte sin abrir. ¡Oh! ¡Que raro!

Por lo menos queda alguna pieza de muestra...

Esto de aquí parecía el cuarto del de mantenimiento, o donde pagaban el salario a los trabajadores antiguamente...

Las antiguas taquillas de los currelas.

¡Por lo menos todavía están las taquillas! Raro que no tengan pegatinas de algún sindicato o de mujeres en bolardas.

La naturaleza siempre reclamará su lugar.

Detalle de las taquillas de la fábrica.

Algunos objetos que se quedaron por aquí para siempre.

La nave por dentro es super amplia. Fijo que fabricaban materiales de tamaño considerable. ¿Eh? ¿Qué esto ya lo escribí? Bah...



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