Flech Urbex: Las casitas de los artistas.

¡Muy buenas mis recaspitosos amigos, seguidores, terrícolas, reptiloides, alienigenas hermafroditas y seres del inframundo! ¿Que tal estáis? ¿Bien? ¿Regular? Tranquilos por que ya he vuelto con otro reportaje sobre lugares abandonados que no dejará indiferente a nadie.

Pues bien, ya estamos al mes de Noviembre, tiempo de ir a buscar setas y destrozar el bosque con la chapolina, buscar castañas y ensuciar la montaña e incluso ir a hacer senderismo sin tener en cuenta que te puede caer una lluvia torrencial cuando menos te lo esperas, pero yo aquí presente amigos mios voy al bosque en busca del abandono, en busca de la dejadez arquitectónica humana y del misterio mas misterioso, en esta ocasión me complace presentaros las casitas de los artistas. ¡Toma ya! ¿Queréis verlas?

En este nuevo abandono tenemos unas casitas que se construyeron allá por los años 1970 y que sirvieron como lugar de relax para aquellos que decidían pasar un veranito lejos de la playa, del mundanal ruido de la ciudad y del ajetreo de la gente, era el lugar ideal para los que deseaban airearse un poco, además de la rica sombra que proporcionaban los pinos tenían una piscina donde se podían bañar, así que mas relajados que estaban imposible. ¡Cuanta caché!
Por desgracia a en el año 2005 estas casitas se quedaron sin inquilinos, el bosque empezó a crecer desmesuradamente y empezó a aparecer algun amigo de lo ajeno, okupa, espíritu e incluso se llegó a usar una casita para la plantación de marihuana. ¡Manda Guevos!

¿Y por que he llamado a este lugar las casitas de los artistas? Pues por que aquí descansaban artistas de renombre como Rivera, Van Gogh, Dali, Picasso, Monet... ¿Que? ¿Que ya están muertos? ¡No hombre no! Cada casita (Que son 6) tenía el nombre de un artista puesto en azulejos a la entrada de las mismas, era mas que nada para diferenciarlas ya que casi todas eran iguales, la verdad es que sería una buena forma de presumir de casa con algun ingenuo diciendole: ¡Eh tio! ¿Sabías que vivo en la casa de Picasso? Jajajaja. Sería la monda.

Bueno en fin, me dejo de tanta letra y os dejo con las fotos, os recuerdo que podéis seguir mis reportajes haciendote seguidor del blog, a través de Google+ y del Facebook.(Instagram no tengo así que no me busqueis por ahí) En fin, os mada un saludo Flech y Gyoko ZeroOxigen, los exploradores mas intrépidos de este mundo mundial. ¡Nos vemos en el próximo reportaje amigos! ¡Chau Riau!

Exploración realizada por: Flech & Gyoko/ZeroOxigen
Fotos por: © Flech
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*Father Forever*

Empezaremos a entrar por la casita de Rivera, esa fachada amarilla y verde queda bien mimetizada con el ambiente.

Por dentro no es que fueran muy grandes pero tenían un par de habitaciones, un pequeño saloncito con chimenea, lavabo y cocina.

Es difícil que en un abandono no destrocen los lavabos.

Lo ideal era aprovechar el máximo de luz solar posible, por eso no habían ni persianas ni mosquiteras. ¿Para que?

Las casitas no eran feuchas, además antes de su cierre se notaba que las pintaron.

Bien, ahora vayamos a por la casa de Van Gogh.

A las pruebas me remito.

No te extrañe que Van Gogh alucinara después de la plantación de marihuana que metieron aquí, ese tubo grande lo delató todo.

Y ahora pasamos a la casa de Gauguin

Esta ya parece estar mas completita.

Aunque meter florecillas como decoración en las paredes no es que sea muy bonito, por lo menos si son pegatinas.

Un fregadero y una nevera, me pregunto si tendrían cocina.

Por lo  menos el lavabo cumplía los requisitos básicos.

La puerta de entrada de una de las casitas, retro total.

Un bosque rodeado de pinos y mimosas.

En la casa de Picasso es donde vivió un Okupa hace tiempo.

Era la que estaba mas completita.

Fijaos que habían hasta cortinas y todo.

Eso si, mierda a cascoporro.

Y trastos a tutiplén. Hasta una linterna se dejó el tío primo.

Esta casa era diferente en diseño a las demás, ya que era un poco mas grande.

La casa de Dalí era de las mismas características que la casa de Picasso.

El problema es que al inquilino le dio por poner una puerta en la terraza en plan cutre y sin sentido, ya ves tu de que le sirvió.

Por dentro es igual a las demás casitas mas pequeñas.

Por lo menos apareció algún mueble.

Y ya por ultimo llegamos a la casita de Monet.

El lugar ideal para tomar el sol.

Lo mismo, fregadero y nevera, parece ser que la comida se la traerían de casa.

Y algunas perchas de diseño variopinto dentro de lo que sería el armario, pero sin puertas.